domingo, 5 de diciembre de 2010

CAPITULO III.- La Masacre y Tortura a Los Judíos Por: Angel Sergio Olvera Corredor N.L.:37

Además de lo que judíos y otros grupos tuvieron que soportar en los campos de concentración, no hay que desgraciadamente de mencionar lo "útiles" que les eran las víctimas, aún muertas, a los alemanes. 
De entre estas "utilidades" que se les daban a las víctimas se encontraban algunos "recuerditos" como: lámparas con piel humana y unas muy ornamentarias.....cabezas sólo para la decoración doméstica.


Jajaje “como era esa imaginación alemana” ya que a esos “bonitos” adornos se les daba una buena presentación con una base de  madera para darle también un tono “más rústico”. No hay que olvidar que una reconocida coleccionista de estos-ejem-objetos, fue la “distinguida” esposa del comandante de el campo de Buchenwald quien también los regalaba a sus amistades. Muchas familias alemanas de clase media tuvieron en sus hogares esta clase de “souvenirs” a modo de trofeo.



Entre otros “usos” que se les daban a las víctimas se hallaban: el aprovechamiento de sus huesos para fertilizar los campos, los cabellos para fabricar fieltro y los dientes de oro para fabricar veladores.
Al pensar  y analizar este tema existe una pregunta que me “taladra el cráneo”  y es la de: ¿por qué Hitler se levantó en armas contra los judíos y otros grupos?; me hago esa pregunta por que yo no creo ese “levantamiento” causado por la derrota de los alemanes en la 1ª guerra mundial y que los judíos tenían la culpa, sin embargo en mi opinión creo que hubo otro asunto en el  pasado de la vida de Hitler que lo haya hecho “abaratarse” el enardecimiento alemán para perseguir y humillar a los judíos y a los demás grupos.
Pero también reconozco  el “otro lado de la moneda” que me hace dudar en lo antes dicho y es el hecho de pensar en que los judíos puede que se hayan merecido actos tan atroces como los descritos y  otros aún peores y la venganza alemana pero en lo que sí no estoy de acuerdo es que “la bala le haya rebotado” a inocentes sólo por que pertenecían a l grupo religioso de aquellos que en serio lo merecieran.



No hay comentarios:

Publicar un comentario